Después de esperarlo por tanto tiempo, y luego de tantos trámites, logré comprar finalmente el tiquete para viajar a China, con mucho esfuerzo, gracias a los ahorros de mi liquidación de trabajo y el aporte de tantas personas generosas, familiares y amigos en Colombia, que compartieron mi alegría y esperan los mejores resultados de mi parte en esta nueva etapa de vida, recursos que me permitieron la compra de este boleto hacia el éxito.
Efectivamente, como los estudios de Chino Avanzado, la carrera que voy a cursar en China con la beca, iniciaban el 9 de septiembre, fue necesario viajar unos días antes, para llegar a tiempo a realizar los trámites de check up o registro en la universidad.
Mi partida de Colombia fue el día 5 de septiembre, jueves. Partí desde el Aeropuerto Internacional Matecaña, de la ciudad de Pereira, a eso de las 4 de la tarde, con rumbo a Bogotá, luego de una emotiva e inolvidable despedida con mis seres queridos, mi familia que tanto quiero.
Llegué a Bogotá, y después de reencontrarme con una amiga y su esposo, emprendí desde la capital de mi país el largo viaje hacia esta tierra lejana. Viajé en la Aerolínea Lufthansa con rumbo a Frankfurt, en Alemania, en cuyo aeropuerto pude comunicarme vía wifi con mi familia. Pero, estaba a solo la mitad de camino, y desde allí, tomé el siguiente vuelo en la Aerolínea Air China, para llegar a mi destino final: Beijing, China.
Itinerario de viaje
Había pasado más de un día viajando y finalmente, arribé a Beijing, el sábado 7 de septiembre a las 11:30 de la mañana (10:30 pm del viernes en Colombia).
Por fortuna no tuve ningún inconveniente en Inmigración, y pasé sin problema con mi Visa de Entrada X al país. Recogí mi equipaje, cambié el dinero que había traído en dólares desde Colombia, en una oficina de cambio de divisas dentro del aeropuerto, por yuanes, y salí finalmente del aeropuerto en el terminal 3.Afuera me esperaba Francisco Li, un amigo de radio china que, gustosamente me recibió y me ayudó a llegar hasta la Universidad de Lengua y Cultura de Beijing. Llegamos, pasada la 1 de la tarde, y al entrar por la puerta principal, nos encontramos con una cantidad de personas, extranjeros en su mayoría que recién llegaban, como yo, e iniciaban el largo proceso de trámites y registros.
Entrada Principal Universidad de Lengua y Cultura de Beijing
En la entrada del edificio principal, un enorme cartel de color rojo nos daba la bienvenida, decía en inglés y chino: Bienvenidos nuevos estudiantes de todas partes del mundo, leer esas palabras me reanimaron un poco, puesto que mi viaje realmente había sido difícil, pensando en la distancia y la separación con mis seres queridos.
Edificio principal en el cuál se realizó el registro de los nuevos estudiantes
Francisco me ayudó con la traducción para iniciar el proceso de registro. Presenté mi Carta de Admisión (Admission Notice), y empezamos a hacer colas y filas para firmar un documento y otro. Por fortuna, salió a la vista, entre los voluntarios que estaban ayudando, una joven chilena, Naty, que amablemente me explicó el proceso y realizó mi registro oficial como estudiante de esta prestigiosa universidad. Me entregaron el carné o tarjeta de estudiante extranjero, un horario con fechas programadas para actividades para los días siguientes como la recolección de notificación de clases, una reunión informativa en español sobre la universidad, la fecha en que vendrá un bus a recogernos para repetir el examen médico que ya había realizado en Colombia, y fechas para recoger resultados y para realizar procedimiento de visa de residencia que, por fortuna, entregarán en la misma universidad.
Registro de nuevos estudiantes en la
Facultad de Entrenamiento de Chino Avanzado
El mismo carné de estudiante extranjero que me entregaron, funciona como tarjeta para el pago de las comidas en el Comedor Principal de la universidad. Este comedor tiene 3 pisos y en cada uno de ellos se puede comprar y probar una variedad enorme de comidas, realmente muy económicas. Para pagarlas, se debe recargar la tarjeta y luego de seleccionar la comida o platos que se desean, se paga el costo total pasando la tarjeta por unas máquinas lectoras.
El comedor se abarrota de gente, especialmente en horarios de comida, es decir bien temprano después de las 7 de la mañana, para el desayuno, luego de las 12:30 pm para el almuerzo y luego de las 5 pm para la cena.
Los dos primeros días fueron difíciles para mí, debido a que las clases todavía no iniciaban, me sentía solo y nostálgico pensando en la despedida con mi familia, y en lo mucho que los extrañaba.
Mi vida en China apenas comienza y me aterra pensar en el tiempo que estaré separado de mis seres queridos.
Por fortuna, las comunicaciones y la tecnología, permite estar cerca de las personas amadas, gracias al contacto constante. El mismo día compré una sim card de China Unicom, en promoción, costó 100 yuanes, y supuestamente tenía costo de 400 yuanes. Entre los servicios incluidos, además de llamadas locales, nacionales e internacionales, dicha sim card contiene un paquete de datos para navegación de 500 Mb por mes, una buena cuota para mantener conectado desde mi celular a redes sociales y otros servicios web. La navegación es 3G y es rápida.
En cuanto al alojamiento, también fue algo riguroso el trámite, sin embargo fue rápido y en menos de una hora, ya me encontraba en la habitación. Los estudiantes extranjeros becados son alojados en diferentes edificios, la mayoría están en los Edificios número 1 y 2 que se encuentran en la calle Xueyuan Lu 15 Hao, dentro de la misma universidad. Cada edificio tiene 14 pisos, y me tocó precisamente habitación en el último piso. Me asusté pensando en la subida de las maletas, pero me tranquilicé al ver los ascensores que funcionan sin problema.
Edificios de Dormitorios Número 1
Las habitaciones son dobles, e incluyen cama, escritorio y un armario de madera tipo closet, para cada estudiante. En el centro de la habitación hay televisor. Además tenemos aire acondicionado y calefacción. Para el uso de la habitación fue necesario pagar 50 yuanes de depósito por los muebles que allí se encuentran. Lo mismo para el aire acondicionado, 50 yuanes más para adquirir control del mismo.
Estuve solo varios días en la habitación hasta el lunes en la tarde, cuando llegó mi compañero de cuarto, un joven francés que también se encuentra becado, pero solo por un año.
Los baños y las duchas son públicas, en cada piso del edificio hay y es necesario compartirlas, no son muy agradables, pero no hay otra opción...